El realismo fue una corriente literaria que buscó describir y recrear lo real, sin invenciones fantásticas y con gran apego a la verdad o a lo que podría considerarse verosímil. La crítica considera que los iniciadores de esta corriente fueron los franceses Balzac y Stendhal aunque hubo notables representantes en otros países, como Dostoievsky en Rusia y Dickens —a quien leeremos esta semana— en Inglaterra. Los autores realistas, en un movimiento que fue paralelo en otras artes, como la pintura, la música o la arquitectura, reaccionaron contra los excesos del romanticismo, corriente con una endémica tendencia a la exageración y la fantasía.
Al llegar a su agotamiento, el realismo sería reemplazado por una forma aún más exigente en cuanto al apego a la verdad y con un carácter mucho más marcadamente político, en tanto los autores comenzaron a buscar no solamente describir las cosas, sino denunciarlas (la pobreza, la injusticia, etc.). Esta nueva corriente se conoce como naturalismo y forma parte del realismo. Surgió también en Francia a mediados del siglo XIX, aunque se expandiría por el mundo occidental rápidamente. Su principal exponente es Émile Zola (Francia, 1840-1902), que incluso desarrolló una teoría sobre los fundamentos de esta corriente.
El naturalismo parte del espíritu cientificista del positivismo de aquella época, cuando el desarrollo de las ciencias se imponía en todos los ámbitos de la vida, y como tal busca expresar lo que sucede en la sociedad de una manera documentada, con especial atención en las capas más pobres de la sociedad.
En América Latina hubo importantes representantes de este estilo literario. Podríamos decir, si las «Tradiciones peruanas» fueran cuentos, que Ricardo Palma (Lima, 1833-1919) fue un gran naturalista, pero las tradiciones son más crónica que ficción y a Palma nunca le falta fantasía. En el Perú es Clorinda Matto de Turner (autora de la novela clásica Aves sin nido), la más importante representante de este estilo, aunque los autores indigenistas de principios del siglo XX heredan los intereses de los naturalistas en cuanto a la representación de la vida de los desfavorecidos en la sociedad.
Esta semana leeremos un cuento perteneciente al realismo y dos al naturalismo. En «Confesión encontrada en una prisión de la época de Carlos II», Charles Dickens (Inglaterra, 1812-1870) aborda el tema del odio, el crimen y la culpa usando la estrategia de la «confesión», es decir, la palabra del protagonista en primera persona y en actitud de monólogo interior. Cabe mencionar que, habiendo sido publicado solo un par de años antes que «El corazón delator» de Edgar Poe, sorprenden las coincidencias entre ambos textos, aunque como veremos más adelante, el punto de vista de Poe es mucho más sórdido y oscuro.
En «Una vendetta» de Guy de Maupassant (Francia, 1850-1893), podemos ver con claridad la descripción de hechos tan verosímiles que a veces resulta impresionante. La mujer que protagoniza el cuento desarrolla una actividad con su mascota, la perra Vigilante, que recuerda los experimentos del fisiólogo ruso Pavlov (1849-1936), quien, en esa misma época, estaba en camino de postular la teoría del reflejo condicional, a partir de la cual surgiría toda una escuela psicológica, el conductismo. Por supuesto, Maupassant no se basa en los experimentos de Pavlov para la acción de este cuento; se trata más bien de una coincidencia posible gracias al espíritu de la observación científica común a ambos ámbitos: el naturalismo literario y la medicina. En su cuento «El Horla», considerado como uno de los primeros relatos de horror, el personaje principal, aparentemente víctima de una enfermedad mental, dice «[el ojo] ignora los millares de pequeños animalillos que viven en una gota de agua»; algo que no fue posible saber hasta que existió el microscopio.
En el caso de «La tristeza» de Antón Chéjov (Анто́н Че́хов, Rusia, 1860-1904), asistimos a las escenas de la pobreza y la soledad en el duro invierno ruso, durante la era zarista, en la que las diferencias sociales eran tan agudas, que se produciría pronto la primera revolución socialista de la historia. Hay que poner atención en el personaje principal, el cochero Yona, y su solitaria tristeza por el hijo perdido, mientras es simplemente ignorado, cuando no maltratado por los demás.
Una cuarta lectura (no obligatoria, es solo una sugerencia) para esta semana pertenece a una corriente posterior al naturalismo, aunque influenciada por él en cuanto al realismo de las narraciones. James Joyce (1892-1941), escritor irlandés modernista, es reconocido por haber revolucionado la narrativa de ficción con su novela Ulises, en la que se narra lo sucedido a un personaje a lo largo de un solo día, de manera no lineal, con una técnica llena de laberintos, vueltas, cambios de punto de vista y otras avezadas estrategias que le valieron ser rechazada para publicación en diversas ocasiones. Hoy, sin embargo, es importante para la literatura porque mostró que era posible decir las cosas de otro modo. Es también muy famoso su libro de cuentos Dublineses, del que tomamos el relato «Eveline», en el que destaca la introspección del autor hacia los sentimientos de sus personajes.
Lecturas obligatorias:
- Dickens, «Confesión encontrada en una prisión de la época de Carlos II»: blog | pdf. (El original en inglés se puede leer aquí).
- Maupassant, «Una vendetta»: blog | pdf. (El original en francés se puede leer aquí [pdf]).
- Chéjov, «La tristeza»: blog | pdf
Una lectura opcional:
Una vez leídos, por favor dejen sus comentarios a las lecturas en el espacio para comentarios de este post. ¡Sean breves!
El cuento, pese a su brevedad tiene la posibilidad de crear un universo infinito que en este caso Dickens, Maupassant y Chéjov desarrollan de manera cautivante. En primer lugar, «Confesión encontrada en una prisión de la época de Carlos II» es una narración en primera persona, en la que el personaje principal aterrado por el futuro y sorprendido por los actos que cometió en el pasado relata su verdad, «la verdad», de lo sucedido. Admite que él no tenía una buena relación con su hermano a causa de sus celos y su cuñada lo sabía a la perfección. El problema surge al asumir la tutela de su sobrino puesto que ve la posibilidad de expresar su rechazo a su hermano mediante el niño, es por esa razón que idea un plan para asesinarlo. El delito cometido lo atormenta de una manera impresionante, al punto de soñar con lo sucedido, pero es la presencia de los labradores y su deseo por escarbar el lugar donde había escondido el cuerpo, lo que lo obliga a confesar. A la luz de su desgracia asume conciencia de sus actos, lo cual desde mi perspectiva no es suficiente para evitar un destino que él mismo diseñó.
Por otro lado,“Una Vendetta” es un cuento que tiene presente, desde el inicio de la narración, el tema de la muerte debido a que el texto nos habla de una viuda quien, además pierde un hijo. En su búsqueda por la sed de justicia y venganza que le produce el asesinato, entrena a su perro con un método semejante al utilizado por Pavlov. Finalmente, tras emprender un viaje para hallar al asesino, consigue la conquista de su empresa. lo expuesto, me permite pensar que la madre actúa movida por las heridas abiertas que causa su constante cercanía con la muerte.
Finalmente, «tristeza» es un relato que muestra cercano al personaje principal. El lector experimenta prácticamente en primera persona la angustia y la desesperación del cochero Yona producidas por la muerte de su hijo. Lo más impresionante de este cuento radica en que no es el ser humano quien se solidariza con el acontecimiento y decide brindarle apoyo al cochero. Sino que es su propio caballo, su compañero fiel, quien en su silencio «escucha» a Yona y contribuye para que pueda alejar de su corazón aquellos sentimientos que lo llevaban a la tristeza.
En los cuatro cuentos, a pesar de ser muy diferentes, hay dos elementos en los que se asemejan: en la muerte y en la soledad.
La soledad es causada en el personaje principal del cuento de Dickens por la falta de aceptación del mundo que lo rodea; mientras que el hermano del protagonista goza del afecto de todos por su forma de ser, este no es el caso con él. En el cuento ambos hermanos representan polos opuestos en el tema de la soledad- uno amó tanto que lo llevó a la muerte, y el otro terminó cometiendo un asesinato por no haber podido sentirse amado.
Es similar el caso de «la tristeza», ya que Yona hace un visible esfuerzo por tener alguien que lo escuche y lo comprenda. Sin embargo, la diferencia con el cuento anteriormente mencionado es que en este la muerte es la causa y no la consecuencia de la soledad.
En «Une vendetta», la viuda de Paolo Saverini conoce la misma soledad que Yona tras la pérdida de un hijo, pero la convierte en deseo de venganza, lo que termina siendo en realidad el enfoque del cuento. La muerte abre y cierra el cuento, tal como lo sugiere el título.
Finalmente, en «Eveline», la soledad y la muerte se presentan de forma similar al del primer cuento, solo que con una variante: tras todas las tragedias familiares, es Eveline, la protagonista, quien se consume. En las últimas líneas es evidente que al perder su oportunidad de escapar, ella ha cambiado irreversiblemente:
«She set her white face to him, passive, like a helpless animal. Her eyes gave him no sign of love or farewell or recognition.»
Aquí, Eveline ha perdido la capacidad de reaccionar y de sentir- incluso es comparada con un animal, lo que sugiere que ha perdido su identidad. En este punto, se puede decir que a pesar de seguir en vida, Eveline ha muerto.
En conclusión: Soledad y muerte, soledad por la muerte y muerte por la soledad.
Concuerdo con Dana, la soledad, la muerte y la tristeza son las principales característica que podemos encontrar en los tres cuentos leídos y analizados. Asimismo, en las dos primeras lecturas, podemos observar la frialdad que existía en los personales principales de la época y como el ser humano puede cometer estos actos por ciertos trastornos o por puro sentimentalismo que pueda tener como la avaricia o locura en el cuento “Confesión encontrada en una prisión de la época de Carlos II” y la venganza y resentimiento que pudimos observar en la viuda de Pablo Savarini. En “La Tristeza” la tristeza que está pasando Yona y la negativa de sus clientes en escucharlo lo condenan a la soledad. Asimismo, creo que el autor busca mostrar cómo era la idiosincrasia en esa época a través de la forma, muchas veces despectiva y egoísta, con la que los clientes tratan al cochero Yona.
De lo leído me resalta que la viuda de Pablo Savararini, quien, a pesar de querer realizar un acto criminal y que no va de acuerdo a las creencias de la iglesia católica, se entregaba y rogaba a Dios para que le de las fuerzas para realizarlos. Esto también es un detalle importante de como el autor muestra la importancia de la religión y la forma en que es vivida en la aquella época. Asimismo, se resalta claramente la influencia del naturalismo, a través de la injusticia que muchas veces no llega a resolverse si no es por sus propias manos, así de frio pero muy real y natural. Esto no es ajeno a la realidad de hoy, pues podemos observar que en muchas comunidades campesinas del Perú se busca la justicia bajo sus propias manos debido a la poca presencia del Estado.
Los tres cuentos son fáciles de digerir, teniendo a La Tristeza de Chejov como el más complejo, según mi opinión.
Estoy de acuerdo con Gonzalo al destacar la soledad, la tristeza y la muerte como características en común entre los tres cuentos. En primer lugar, el cuento Dickens demuestra que muchas veces la culpa y el saber que uno va a ser descubierto conlleva a que la verdad salga a la luz por más impactante que sea. Asimismo, se manifiesta como los celos pueden afectar de tal manera en una persona hasta el punto de cometer un crimen.
En segundo lugar, el cuento «La Tristeza» es una clara muestra de lo que es vivir sin sentirse escuchado; en otras palabras, en soledad. A su vez, se pone en manifiesta el egoísmo del ser humano frente a otras personas que requieren contarte algo de su vida para poder sentirse «aliviados». Lo más resaltante termina siendo que su amigo fiel, su caballo, es quien lo escucha y ayuda a sobrellevar su vida.
En tercer lugar, «Una Vendetta» deja en claro desde el inicio las consecuencias de la muerte; es decir, que en muchas ocasiones cambia radicalmente a las personas. A medida que avanza la lectura, se observa la preparación y culminación de un asesinato por venganza de una forma muy sutil.
Finalmente, los tres cuentos cumplen con el requisito indispensable para ser catalogados «cuentos» que es el hecho de ser leídos en una sola lectura. El que más me atrajo fue «Una Vendetta» por los detalles que muestra.
Es sorprendente como los sentimientos humanos de tristeza, angustia y muerte pueden ser tan bien descritos por Antón Chejov, Guy de Maupassant y Charles Dickens. Sin embargo, creo que lo que más ha resaltado de estas lecturas ha sido la Muerte.
En “Confesión encontrada en una prisión de la época de Carlos II”, lo más interesante, es que la muerte se ve como una salida y un alivio para el narrador, aunque más tarde esto traerá consecuencias atroces. “No tengo valor para anticipar mi destino, o para enfrentarme varonilmente a él. No tengo compasión, ni consuelo, ni esperanza, ni amigo alguno…”
En “Vendetta”, vemos otro lado de la muerte. La anciana que busca vengar a su único hijo con la ayuda de su mascota fiel. Al ser narrado en tercera persona no somos totalmente conscientes de los sentimientos que llenaban el corazón de la anciana, y como la historia no narra más allá del momento del asesinato, nos da la impresión que la anciana tan calculadora e (irónicamente) católica vivirá tranquilamente por el resto de sus días. ¿Qué la hace diferente del protagonista anterior? ¿Será que su corazón de madre la exonera del remordimiento? ¿Considerará justo el haber renunciado al paraíso por vengar la muerte de su hijo?
Teniendo a estos personajes tan similares en acciones pero diferentes en el interior, Chejov nos presenta a Yona en “La Tristeza”, un viejo cochero que vive en la soledad lamentándose por la muerte de su hijo pero sin tener a nadie quien lo escuche. La muerte lo tormenta pero a diferencia de los relatos anteriores, él no la deseo ni tuvo nada que ver en el proceso. Me ha parecido un relato desconsolador, porque no solo se describe la tristeza en la que vivía Yona, sino también la indiferencia en la que hemos caído las personas. Todos parecemos tan concentrados en nuestras vidas, en una sociedad donde la supervivencia ha priorizado sobre la Los autores realistas utilizaban sus relatos para hacer una llamada de atención a la sociedad actual y sus problemas, Tristeza es un ejemplo de ello.
No sabría decir cuál es mi favorito, pero el más intrigante sin duda es Vendetta, la figura de la anciana perturbada por sus deseos de venganza es un personaje muy complejo.
Honestamente, el cuento de Charles Dickens no me llega a convencer. Esto no es ninguna sorpresa, pues siempre lo he encontrado aburrido; es el primer cuento suyo que leo pero le encuentro los mismos defectos que a sus novelas. Mi principal molestia con él (y que en verdad no es tanto un defecto sino un tema subjetivo) es que no logro empatizar con sus personajes. La tristeza y sufrimiento de estos, sean huérfanos en Londres o el personaje principal del cuento que leímos, no llegan a hacerme sentir nada. Efectivamente, le dedica gran parte del texto a representar qué siente el condenado, buscando que uno llegue a sentir ira y repudio pero cierta comprensión por el también; el efecto real es indiferencia. A lo largo del cuento, me sentí completamente indiferente al estado emocional del personaje. La explicación de su ira, culpa y odio cae como inmadura y exagerada, y sus defectos y crimen no llegan tampoco a generar indignación. Es otro personaje blando y poco interesante de Dickens. Otro aspecto que me parece le resta al cuento es el hecho que conocemos el desenlace antes de que ocurra: sabemos que ha sido condenado a muerte y que va a morir el día siguiente. Así, la única fuente de curiosidad que queda es el “cómo”, sin embargo este no fue ni creativo ni interesante.
El segundo cuento, “Una Vendetta”, genera mucho más sentimientos con muchísimas menos oraciones dedicadas a cómo se sentían los personajes. La ira y frustración de la madre es evidente y absolutamente relacionable, aun así casi no se describan sus sentimientos en sí mismos. Las acciones de la madre gritan los sentimientos detrás de estas, y lo hacen mucho más efectivamente que la prosa decorada de Dickens. Un cuento corto y directo, el final me dejó satisfecho tanto con los personajes (el personaje) como con el desenlace.
El tercer cuento, “La Tristeza”, se lleva a los otros dos de encuentro y por mucho. Retrata muy claramente la tristeza del conductor y su necesidad de ser escuchado. El final agridulce parece muy adecuado a la idea que intenta transmitir el autor. Además, deja clarísimo que la fuente del problema no es la muerte de su hijo, sino la incapacidad del padre de contarle a nadie lo que siente, llegando este a humillarse a sí mismo buscando un oído que lo escuche. Se entiende el cuento, entonces, como una crítica a la ciudad en contraposición a lo rural – el autor hace múltiples analogías entre la vida en el pueblo con la vida en la ciudad, y cómo el problema principal no sucedería en su pueblo. Una crítica que sí tengo es cómo retrata a todos los citadinos como gente sin corazón, muy ocupadas en sí mismas como para ayudar a nadie más. Esto se siente como algo bastante, no sé, infantil. Esta representación de personajes con una brocha tan grande no se siente muy realista que digamos. Si bien es factible exagerar la mentalidad citadina, esto no parece que vaya muy de acuerdo a la vertiente naturalista.
Los tres cuentos me dejaron una sensación de melancolía. Por un lado, la corriente del realismo encontrada en el cuento de Dickens hace una crítica a la injusticia y maldad de la sociedad de aquella época de una manera impecable tal que traslada al lector a cada escenario del cuento. Así, pude sentir la desesperación del protagonista en una celda oscura y solitaria. Además pude sospechar desde que el protagonista compartía sus pensamientos acerca del niño, que eventualmente acabaría con su vida. Por ello, en este punto estoy en desacuerdo con Daniel. Pienso que el cuento permite identificarte con los personajes.
Por otro lado, con respecto a los otros cuentos, es fácil detectar que ambos pertenecen a la corriente naturalista. “La tristeza” por ejemplo, se centra en la pobreza de una sociedad. En este sentido, si bien la muerte del hijo del protagonista es una situación importante lo que más me llamó la atención fue el modo de vida de las personas pobres. Ello sumado al clima helado te hace pensar en lo insostenible que sería vivir en dichas condiciones. Finalmente, el cuento de “La Vendetta” me hizo reflexionar mucho sobre el amor de madre y el alto grado injusticia que puede llevar a que ella la busque por sus propios medios. Asimismo, el que la madre utilice técnicas científicas para adiestrar a la perra es clave para detectar la corriente naturalista.
Por último, tal y como lo mencioné al inicio, si bien lo cuentos tienen una técnica literaria impecable no hubieran sido lecturas que habría elegido por mí misma dada la sensación de melancolía que me produjeron luego de leerlos. Por lo mismo, comparto las conclusiones de Dana pero considero que en lugar de tristeza debería ser melancolía, un sentimiento más fuerte.
Aurore CHEHERE
En este primer cuento de Dickens aparece claramente las secuelas de la guerra.
En efecto, al principio, el protagonista cree que es la existencia de su hermano , que los hace infeliz y despues de su muerte la de su mujer.Sin embargo , despues de que los 2 mueran, el piensa estar feliz . No obstante, veyendo que no es el caso, piensa que eso se explica por la existencia del nino.
Asi, focaliza todos sus pensamientos en el nino y en la programacion de su crimen. De este modo, el, olvida su propia infelicidad y eso le estimula.
Sin embargo, la muerte del nino no le reconforta y pues comprendemos que su infelicidad no se debe a un elemento exterior a su persona, pero que se encuentra dentro de el mismo.
En efecto, con la llegada de los dos oficiales, recordamos que el era tambien oficial y que su locura debe venir de la guerra. Asi, con este cuento,
Dickens intenta mostrar lo malo de la guerra s sobre los seres humanos y mostrar que se agarra en el espiritu de los militares, creendo locura. Asi, muestra de una parte que la guerra no crea a animales sino que por ser humanos no pueden vivir con los recuerdos de la guerra.
La característica en común entre los tres cuentos fue la muerte, debido a que de una manera u otra ésta se hace presente en todos ellos.
Por ejemplo, en «Confesión Encontrada en una Prisión de la Época de Carlos II» me sorprendió mucho la frialdad con la que el narrador cometió el asesinato hacia su sobrino, solo porque creyó que éste no lo quería y lo miraba de la misma manera acusatoria como lo miraba la esposa de su hermano, pero para no aceptar que lo hacía por ese motivo uso como excusa el querer reclamar la herencia que su hermano le dejó al niño. También me dio miedo cómo el personaje principal podía llevar sentimientos tan negativos hacia su hermano , el odio y la envidia hacia su hermano eran tan notorios que la esposa de su hermano y el hijo de éste se dieron cuenta de toda su maldad.
Por otro lado en «Una Vendetta» siento que el autor quiso representar toda la frialdad que una persona puede llegar a tener al momento de llevar a cabo su venganza, plasmando de una forma cruel en la historia cómo es que la viuda entrena a su perra para que lleve a cabo el asesinato de Nicolás Rovalati, y después de realizarlo salir tranquila de la escena y asegurar que desde ese momento pudo dormir tranquila. Otra cosa que me sorprendió fue que la sociedad supiera dónde se ocultaba el asesino de Antonio Savarini y nadie hiciera algo, solo lo dejaban tranquilo sin hacerlo pagar por el crimen que cometió.
En el libro «La Tristeza» la muerte no se comete durante la narración de la historia, sino que ésta ya había ocurrido hace ya algún tiempo y el cuento se basa en la necesidad del padre de la persona fallecida en ser escuchado, en dar a conocer la tristeza que llevaba dentro desde la muerte de su hijo. Sin embargo, este cuento me pareció un tanto aburrido,porque a diferencia de los otros dos cuentos, era un poco monótono y no le encontré una estructura clara, lo único que me llegó a llamar un poco la atención fue la necesidad del
ser humano de ser escuchado, como algunas veces no es la pena la que te duele tanto, sino el hecho de no poder compartirla con nadie.
Los tres cuentos tratan sobre la muerte y tristeza, aunque de diferentes maneras. En el cuento de “Confesión encontrada en una prisión de la época de Carlos II”, el personaje principal se encuentra triste porque en sí, no se siente satisfecho consigo mismo ni con la vida que lleva y es un hombre que tiene mucha envidia hacia su hermano. A mi parecer, fue de esperarse que asesinara al único hijo de su hermano que fue dejado al cuidado de su esposa ya que le recordaba a su hermano, la principal razón de su tristeza. Sin embargo, al contrario del cuento “Una Vendetta”, el personaje se siente intranquilo luego de cometer el asesinato, ya que tenía pesadillas constantemente por las noches y se mostraba intranquilo cada vez que una persona pasaba por el lugar donde había enterrado al niño.
Por otro lado, en “Una Vendetta”, la Sra. Savarini se encuentra desconsolada, triste y llena de venganza una vez que se entera de la muerte de su único hijo. La Sra. Savarini vive cada día pensando en una forma de vengar a su hijo. Cuando finalmente pensó en una forma de vengarlo, no dudó en entrenar a su perro para que estuviera listo para matar al culpable y una vez que el perro estaba listo, fue hasta el pueblo donde se escondían todos los bandidos. La Sra. Savarini no la pensó dos veces y actuó y luego de matar al culpable, a diferencia del personaje del párrafo anterior, se sintió mejor y pudo dormir tranquila.
Por último, el cuento “La tristeza” es parecido a los dos mencionados anteriormente porque Yona se siente perdido, solo y triste después de la muerte de su hijo. En sus horas de trabajo, Yona solo buscaba un cliente que quisiera escuchar su historia para poder sentirse mejor, a diferencia de las historias mencionadas anteriormente. Este hombre estaba dispuesto a que se burlen de él y a que lo maltraten con tal de alejarse de sus pensamientos por un momento o de contarle a una persona sobre la muerte de su hijo. Al fin del cuento, le termina contando lo sucedido a su caballo, sintiéndose más aliviado.
En conclusión, en los tres cuentos se habla de la tristeza y de la muerte, aunque en cada uno estos sentimientos son causados por situaciones diferentes y los personajes reaccionan de diversas maneras, maneras que los pueden llevar a su propia muerte, como en el primer cuento, o que los pueden ayudar a aliviar la carga que llevan encima por la muerte de un ser querido, como en los dos últimos cuentos.
El cuento “Confesión encontrada en una prisión de la época de Carlos II” de Charles Dickens narra los sentimientos de miseria y odio de un ex teniente del ejército, elementos propios de la época del realismo. Para ello, el autor crea un ambiente de suspenso con eventos inesperados a través de la narración del personaje principal en primera persona, quien podría ser considerado un anti-héroe. En dicho monólogo él confiesa sus sentimientos de antipatía y envidia hacia su hermano y la indiferencia e insensibilidad hacia la muerte de sus familiares. El narrador dice “nunca fui un hombre valiente, y siempre, desde mi niñez, tuve una naturaleza desconfiada, reservada y hosca”, lo cual es irónico dado que él fue teniente en el ejército, labor que usualmente se relaciona con coraje y sacrificio.
Los tres cuentos comparten un tema en general que es la muerte.
El primer cuento, “Confesión encontrada en una prisión de la época de Carlos II”, narra en primera persona la razon por la que va a morir el personaje. Esta razon tambien esta relacionada a la muerte.
El segundo cuento, “Una vendetta”, narra la historia de una señora quien sufre y jura venganza por la muerte de su hijo, quien murió asesinado. El cuento describe a detalle los espacios geograficos, caracterizticas y vedtimenta de los personajes, lo que hace que el lector se adentre por completo al cuento.
El tercer cuento, “La tristeza”, narra la historia de un cochero, quien sufre la muerte de su hijo. Pero el tambien sufre de algo particular, que no puede desahogar su pena.
En lo personal, creo que puedo relacionar los cuentos con otro tema en común y este es el desahogo. Los 3 personajes principales buscaban desahogar su rabia, pena o tristeza y lo hicieron de distintas maneras. El teniente, por ejemplo, se desahogó asesinando al niño, ya que con el recordaba a la esposa de su hermano. La anciana que perdió a su hijo se desahogó vengándose del asesino de su hijo. Finalmente, el cochero Yona se desahogó contando por fin su historia al caballo.
Los tres cuentos comporten cuatro caracteríticas comunes: la muerte, la melancolía , soledad y la frialdad emocional.
En el cuento «Confesión encontrada en una prisión de la época de Carlos II» de Charles Dickens, se puede apreciar una alta frialdad emocional tras el planeamiento y asesinato del sobrino por parte del personaje principal. Me pareció interesante en comparación con los otros cuentos la facilidad con la que el personaje planeó y realizó el asesinato hacia el niño. En mi opinión esta acción además de haber sido influenciada por la envidia y las inseguridades propias del asesino, tuvo un gran peso la influencia de la vida militar de la época y la repercusión de esta en el personaje principal.
Con relación al cuento «Una Vendetta», es la sed de venganza y la inmensa melancolía, la que lleva a la viuda Savarini a cometer el asesinato en honor a su hijo. Lo que me impactó del cuento es la habilidad del humano, motivado por una gran pasión, para cumplir lo que se propone . En este caso sería el haber entrenado al perro para que este sea el que realice el asesinato debido a las condiciones físicas del personaje principal.
Por otro lado en el tercer cuento «La tristeza» se narra la historia de un cochero que sufre la muerte de su hijo y se encuentra ahogado en soledad y melancolía. Lo particular de este cuento es que el humano busca llegar siempre a su fin. En este caso se logra a través del ser escuchado por su caballo, el cual se ha generado finalmente por la frialdad humana de la sociedad.
Por ultimo opino que los 3 cuentos reflejan acciones que aún encontramos en la sociedad y refleja además como el humano combate con ellas. Opino que los tres cuentos me cautivaron.
Los tres cuentos leidos tienen una facilidad de envolver al lector en el tema, son fáciles de digerir y que tienen en común la muere o el asesinato.
Podemos también darnos cuenta que a pesar de que estas historias hayan sido escritas en siglos pasados, todavía seguimos viendo en las noticias casos bastante parecidos, que nos hacen preguntar. Cuanto vale una vida para estos asesinos?.
En la primera lectura podemos observar claramente que es lo que pasa en la mente del asesino de un nino, que no hizo nada malo, y que tanta puede ser el amor a lo material que no le importo matarlo para poder quedarse con toda la herencia. Podemos ver todo lo que pasa en la mente del asesino, y todo el proceso desde el asesinato hasta su captura.
Al igual que en la primera lectura podemos ver el caso de un asesinato, pero esta vez lo vemos desde la perspectiva del familiar de la victima, y todo el proceso de como prepara y jura vengar su muerte, vemos desde el asesinato de su hijo único hasta la venganza contra esta persona. Todo lo que pasa en su mente y como planea paso a paso, dia tras dia, su venganza.
En la tercera podemos ver el sufrimiento, y la tristeza que genera la muerte.
En general como dije al inicio, las 3 lecturas tienen algo en común, y todo lo podemos apreciar desde ámbitos diferentes, lo mas sorprendente es que estos casos han sido de siglos atrás, y con todos este tiempo, ahora en la actualidad, siguen habiendo estos mismos casos.
Los 3 cuentos han sido para mi fáciles de leer y con un tema bastante llamativo que te cautiva desde las primeras lineas.
Los 3 cuentos pertenecientes a la corriente del realismo tienen una clara conexión entre ellos: la muerta. Pese a que la muerte está presente, afecta a los personajes de maneras muy distintas.
En el caso de los dos primeros cuentos, los personajes principales han sido afectados por la muerte de seres cercanos a ellos, y además se han convertido ellos mismos en asesinos por distintos motivos.
En «Confesión encontrada en una prisión de época de Carlos II», el hecho que se emplee el narrador en primera persona acerca al lector muchísimo al cuento y es posible percatarse del sufrimiento y pensamientos del personaje en torno a la muerte de su sobrino, a quien el asesina. Por ello, es posible también captar como se arrepiente de lo hecho y le gustaría nunca haberlo hecho. Tras realizar el asesinato, el personaje se siente intranquilo.
A diferencia de estos sentimientos tras el asesinato, en el caso de «Una vendeta», la viuda de Pablo Savarini siente una liberación al cumplir con el asesinato de Nicolás Rovalati. Ella no siente arrepentimiento alguno tras cometer el asesinato porque siente que ha cumplido con su deber y ha vengado la muerte de su hijo. Por el contrario, el lector puede interpretar que se siente tranquila tras el asesinato.
Por otro lado, en el tercer cuento, el personaje principal se ve afectado por la muerte de su hijo, de una manera tan cercana que parece que él mismo hubiese muerto en vida. En este caso, la soledad lo afecta tanto que parece que el estuviese muerto en vida.
Los 3 autores logran de distintas maneras, aunque igual de impactantes, transmitir al lector a un mundo de un realismo de venganza, muerte, soledad, frialdad.
En el cuento de Maupassant, vemos la rutina de la madre despues de la muerte de su hijo. La venganza aparece como un medio para ella, de sobrevivencia. En efecto, esta venganza les permite superar la muerte de su hijo occupando su espiritu en la preparacion de la venganza. Pero alli aparece lo paradojico de la venganza : por una parte les permite no pensar en el muerto pero por otra parte le destruye porque no les permite pasar a otra cosa y sigue viviendo en el pasado.
En la tristeza como en los 2 otros, se ve claramente el tema de la soledad. En efecto, el protagonista prefiere quedarse con otras personas y eso cualquiera que sea el preci : humillacion… Asi mientras que la madre en el cuento de Maupassant encuentra en la venganza un medio para hacer su duelo, el, piensa que lo encontrara hablando con otros. Cosa que no logra hacerlo por culpa del egoismo de los otros. Asi, en este cuento se destaca el sentimiento de soledad y de tristeza del heroe pero tambien el lado malo de los seres humanos.
Para concluir, creo que los 3 cuentos hacen hincapie en la soledad y lo vinculan con la muerte. En efecto, puede ser la causa de una muerte (cuento 1) o el puro efecto. Ademas, a traves de esos cuentos vemos que la muerte siempre se ve como algo negativo :
-cuento 1 : incarne la locura humana.
-cuento 2y 3 : se ve como una injusticia.
ademas, vemos que cada protagonista intenta olvidar la muerte: hablando del muerto, poniendo un cesped sobre la cuna o vengando a ello Pero ninguno de ellos logra olvidar al desaparecido.
En las lecturas ha quedado clarísima la intención de los autores por reflejar los males que afectan a la sociedad y cómo ello motiva a los personajes a tener una determinada conducta. En la primera lectura a diferencia de las demás, el autor se enfoca más en describir, analizar y resaltar la personalidad del personaje principal para sumergirnos en su mundo y poder “comprender” qué fuerzas lo llevaron a cometer tal barbaridad. Me parece que su propósito es mostrar de manera cruda hasta qué punto puede llegar un ser humano cuando sólo se deja llevar por meros impulsos, y, cómo influye un medio hostil sobre la forma de ser del personaje hasta el punto de llevarlo a tratar de enmendar su error.
Las dos siguientes lecturas fueron más realistas en cuanto al esfuerzo que se nota por describir las injusticias sociales, las costumbres de la sociedad donde se desarrollan los acontecimientos y los diferentes desenlaces de la vida de los personajes motivo de estas fuerzas. Es evidente que los sentimientos prevalecientes en estas dos corrientes son los de tristeza, frustración, odio, soledad, debido a que se busca analizar rigurosamente la realidad y los problemas a los que internamente nos enfrentamos.
Los cuentos leídos esta semana tienen un sentido de observación y descripción de la realidad que, por más oscura o deprimente que esta pueda parecer, se adapta a la forma de pensar de los autores. Muestran a la «miseria humana» como el estado más real o natural del ser humano, en contraposición a la idealización romántica.
Así, en “Confesión encontrada en una prisión de la época de Carlos II” el protagonista se enfrenta a sentimientos de envidia, celos, rencor y desconfianza, mostrándolo como un asesino ausente de compasión, consuelo, esperanza o arrepentimiento. Mientras que “Una vendetta” de Guy de Maupassant aborda también temas como el asesinato, odio y venganza. En este caso, el dolor por el asesinato de un hijo revela los aspectos más oscuros de una madre que busca la venganza.
Por otro lado, “La tristeza” de Antón Chéjov se desarrolla en un ambiente de miseria, frialdad y tristeza dónde el personaje principal, el cochero Yona, refleja que los “excluidos sociales” son “invisibles”. Pone en evidencia los instintos egoístas de una sociedad injusta que da la espalda a los marginales. Si el hombre es un ser social, al ignorarlo con tan solo pasar de largo o no escucharlo, se le arrebata aquello que le permite sentirse humano y se convierte en una paria.
El el cuento Eveline de James Joyce, se ve una otra forma de narrar. En efecto, mientras los otros cuentos se focalisan mas en los actos diarios, el de james Joyce hace mas hincapie en lo mental, en lo que se pasa en su cabeza. No obstante, hay vueltas en lo «concreto» a traves algunas acciones que pasan a su alrededor. Asi me parecio mas interesante este cuento mismo si no estoy segura de haber bien entendido el final. si alguien puede explicarlome !!
Aurore, el cuento de Joyce efectivamente es más intimista. Como buen modernista, ya no le preocupa el apego a lo real (la objetividad) de lo que cuenta, sino lo que sucede en la psicología y los sentimientos de los personajes. El final es una situación muy triste: Eveline, después de todo el proceso de «liberación» que significó para ella enamorarse y planear la salida de una realidad doméstica que la oprimía, se atemoriza en el momento decisivo y sacrifica esa libertad por el compromiso adquirido con la familia.