“Día domingo” de Mario Vargas Llosa, por Milagros Chipana

Mario Vargas Llosa es sumamente conocido por sus cuentos, novelas literarias y obras teatrales. Los primeros pertenecen a su obra temprana, a sus primeros años como escritor. En la segunda etapa se da su boom literario y desarrolla sus novelas más célebres. A lo largo de su carrera ha obtenido una serie de premios tanto nacionales como internacionales hasta que en el 2010 se hizo merecedor del Nobel de Literatura.

Si bien es cierto que Vargas Llosa es mayormente reconocido por sus novelas, a través de sus cuentos también podemos apreciar rasgos que lo definen como escritor en la primera etapa de su vida.

“Día domingo” es parte del libro Los jefes, conformado por seis cuentos y publicado en 1959. Este cuento nos presenta un conflicto humano, nos cuenta la historia de dos amigos que disputan el amor de Flora. Ellos se ven envueltos en una serie de retos que deben cumplir para ver quién es merecedor de este amor, demostrando valentía pero también impulsividad.

A pesar de ser un cuento algo extenso, mantiene el interés del lector porque nos permite una lectura ágil a través de un vocabulario sencillo y coloquial. Además, en mi opinión la literatura de Vargas Llosa presenta características del realismo, es decir, situaciones carentes de fantasía que pueden ser inventadas pero no con ficción.

Se podría asumir que el escritor vivió una situación parecida, la disputa de un amor podría ocurrirnos a cualquiera de nosotros, sobre todo durante la juventud (edad que coincide con la edad de Mario Vargas Llosa al escribir este cuento). Al construir la trama basándose en una situación tan familiar se puede generar un vínculo lo cual permite una mayor identificación con la lectura.

También se ponen de manifiesto una serie de sentimientos propios de la edad de los protagonistas, tales como el amor, el orgullo y la irresponsabilidad para medir consecuencias. Pero no todo es negativo, también se ve la lealtad de Miguel hacia Rubén al decidir salvarlo, el respeto y “palabra de hombre” al no contar lo sucedido mar adentro.

Por otro lado, la descripción es muy buena dado que uno se puede imaginar el frio, la desesperación y el miedo al pensar que pueden perder la vida. Al decir que el cuento toma lugar en Miraflores y complementarlo con la descripción de los escenarios permite al lector imaginarse en el lugar que se describe.

Personalmente a mí me agradó bastante “Día Domingo”, aunque hay partes en las que yo decidiría diferente. Por ejemplo, bajo ninguna razón saltaría en pleno invierno limeño a la reventazón o tomaría para ver quién se embriaga primero. Estas situaciones que el autor propone sin dar crítica ni comentario alguno, permiten que el lector se forme una opinión y haya un debate interno sobre qué es lo correcto. En mi caso, no las apruebo ni las realizaría pero sí las imagino posibles.

Por último, yo recomiendo leer este cuento ya que es sumamente entretenido y se puede entender fácilmente. Asimismo, creo que está de más decir que Mario Vargas Llosa es un gran escritor y leyendo sus cuentos podemos conocer otra etapa de su literatura y entenderlo mejor.