El desarrollo de la literatura peruana contemporánea, apoyada sobre la extraordinaria obra que la precede, ha diversificado sus temáticas y contenidos, sus estilos y preocupaciones, a la par que crece el número de autores activos y se hacen cada vez más presentes tanto los autores de fuera de Lima como las autoras en un contexto tradicionalmente machista y limeño. Aunque la capital es aún el destino donde aspira a triunfar un escritor, durante la última década se han multiplicado las editoriales independientes y las fundadas en otras ciudades, y se organizan ferias literarias y libreras importantes en Trujillo, Huancayo, Arequipa, Iquitos y cada vez más ciudades.
Los temas de la literatura contemporánea en el Perú son tan diversos como el país mismo. Se ha ido abriendo espacio la literatura fantástica y de ciencia ficción; los temas policiales ocupan un lugar importante, y el horror y el fantasy se han hecho un lugar mientras se desarrolla la literatura infantil y juvenil. Si bien la mujer ha estado siempre presente en la poesía peruana, hoy las narradoras irrumpen en un espacio tradicionalmente machista con estupendas novelas y relatos.
Los temas locales (andinos, amazónicos), herederos de las tradiciones indigenista y regionalista abundan todavía, revivificados ante las nuevas dinámicas sociales, y se desarrollan a la par de los otros nuevos temas. Los autores nacidos en las décadas de 1950, 1960 y 1970 representan un universo amplio y diverso. Son muchos, pertenecientes a estas generaciones, los que han alcanzado notoriedad, y no han faltado antologías que traten de cubrir su presencia.
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Zeín Zorrilla (Huancavelica, 1951)
Zeín Zorrilla
Entre los autores contemporáneos leeremos «Inundaciones», de Zeín Zorrilla, uno de los maestros en la representación literaria de la conflictividad social reciente del Perú: la sociedad posterior a la violencia, la de las mezclas y mestizajes, la de las generaciones hijas de migrantes pero nacidas en las ciudades y en proceso sostenido de “emergencia”, la de una cultura popular nueva e incomprensible para la aristocrática Lima del “canon criollo”. A mediados de la década pasada, Zorrilla fue uno de los protagonsitas de la polémica entre la literatura andina como subalterna y el canon limeño como hegemónico. Sus argumentos a favor del reconocimiento de la subalternidad literaria han quedado sólidamente plasmados en sus controversiales Manifiestos sobre la literatura andina.
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José Güich (Lima, 1963)
Pepe Güich
La obra de Güich es una de las que mejor representan a la nueva literatura fantástica peruana. El cuento “Días verdes” muestra la exacerbación de situaciones de la vida cotidiana para explotarlas hasta sus últimas consecuencias. Es muy recomendable su obra fantástica, por ejemplo, en los relatos de los libros El mascarón de proa, Los espectros nacionales y Control terrestre así como sus novelas fantásticas-detectivescas El misterio de la Loma Amarilla y El misterio del Barrio Chino, ambas protagonizadas por el genial detective Pablo Teruel en la Lima de principios del siglo XX. Una de las características de algunos de sus cuentos es la dotación de vida y personalidad a objetos que no deberían tenerla, para hacerlos actores de interesantes situaciones dramáticas, muy al estilo de lo realizado por Fuentes en “Chac Mool” pero más del lado de lo fantástico y menos del realismo mágico que caracterizó a algunos autores del boom.
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Rocío Silva Santisteban (Lima, 1963)
Rocío Silva Santisteban
En la obra de Rocío Silva Santisteban asistimos a una literatura fuerte, cruda, amenazante, que ayuda también a romper prejuicios en torno de la literatura femenina. Además de narrativa, ha publicado poesía y ensayo; es periodista y una incansable activista por los derechos humanos. El acercamiento de Silva Santisteban a los márgenes de la sociedad, a la indigencia y la violencia de las calles, no tiene igual entre sus compañeros de generación.
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Las lecturas:
Los días verdes: me impactó y me hizo acordar de una película que se llama el fin de los días en la que en la que una plaga emitida por las plantas hacen que los seres humanos se aniquilen entre sí. El autor va revelando lo que en realidad sucede poco a poco y eso le pone más intriga y suspenso a la historia.
Me gustó «El Limpiador», la historia es cautivante y los personajes son muy interesantes, desde el padre de la victima, el sicario y hasta Monstrenko.
El sicario al final le saca el corazón a Monstrenko para comérselo y recuperar «el sentir».
En el caso de «Inundaciones», es interesante el mensaje de que es importante la esperanza a pesar de que las cosas no vayan bien y también del poco interés de los dueños de la mina por los obreros de la mina, anteponiendo su interés por el dinero antes que el bienestar de sus trabajadores.
«Inundaciones» me pareció interesante porque refleja un hecho de la vida real sobre como se nos presentan nuevas oportunidades laborales y no las podemos aprovechar ya que uno puede sentir pena por la mala situación que este afrontando la compañía y a los dueños pareciera no interesarle mucho el bienestar de sus trabajadores sino mas bien un interés lucrativo junto con los beneficios económicos que puedan obtener.
En «Inundaciones» me pareció interesante cómo el cuento representa una sociedad centralizada . Me gusto la analogía que se hace de la organización minera con un cuerpo humano , en la que la peor parte se la llevan los que trabajan directamente en las minas . Además , los obreros y los ingenieros ponían todo de se parte para solucionar los problemas y no defraudar a su gente mientras que a la «patrona» no le importaba la gente sino las utilidades de la minera . En el limpiador , la autora describe todos los sucesos crudamente . Pero me parece algo fantástico que el limpiador no tenga sentimientos . Además , me parece raro que el limpiador haya ayudado al viejo a vengar a su hija .
Las tres historias me parecían muy interesantes, pero «Inundaciones» me llamó mucho la atención, pues retrataba bastante bien la forma en la que se estereotipa a los dueños de empresas y millonarios. El contraste entre todo el sufrimiento y la lucha de los obreros por mantener a flote la mina, pues había un sentimiento de compromiso y agradecimiento hacia ella, contrapuesto con la falta de interés y poco a ningún aprecio por su sacrificio con el que se encuentran cuando van en busca de «la patrona», es un clásico de lo que se suele acusar a la clase adinerada. El sentimiento general suele ser que la clase adinerada se enriquece a costa del esfuerzo de la clase menos favorecida, y sobre ideologías como esta es que se sustentaron acciones como la de la reforma agraria. Podemos ver, que pese a que económicamente se ha encontrado un sustento a la importancia del desarrollo de la élite para poder activar la redistribución de recursos en el resto de la sociedad, el sentimiento de desigualdad sigue siendo una constante.
Todos estos cuentos fueron mucho más largos comparados a los que habíamos estado leyendo, pero a la vez mucho más fáciles de digerir. Mi cuento favorito fue «El limpiador», no por la trama porque esta es un poco oscura y espeluznante, pero me encantó la narración de la historia. Cada minúsculo detalle era explicado a la perfección lo cual lo hacía mucho más interesante y te llevaba a no poder parar de leer; además, a pesar de lo tenebroso de la trama,en cuento sigue teniendo un toque encantador debido al aire poético que cada oración tenía. Definitivamente, la autora quiso romper todos los prejuicios y paradigmas que rodean a la literatura femenina, y tuvo éxito en el intento.
De igual manera, «Los días verdes» también tiene una prosa estupenda, pero a la vez el tema del cuento es escalofriante en donde se presenta una aniquilación de la raza humana que proviene de nosotros mismos. Asumo que de cierta manera, los autores quieren mostrar todos estos hechos horrendos describiéndolos de una forma tan elaborada y cautivante, que al final el lector no lo toma con desprecio sino con gusto. Mientras que «Inundaciones» se siente mucho más cercano a la realidad, tal vez porque la mayor parte del cuento se basa en diálogos o tal vez porque la historia se aplica perfectamente a la realidad nacional. Todos estos cuentos me cautivaron tanto ya que la literatura nacional contemporánea tiene mucho potencial, pero lamentablemente no recibe el apoyo que debe para ser más reconocida.
La historia que mas me cautivó fue la de “Inundaciones” debido mas que todo a la forma en como estereotipaban a la gente pudiente. El enfasis que se hace entre el sufrimiento y la lucha de los obreros por «ponerse la camiseta» y mantener a flote la mina es genial y muestra el nivel de compromiso y agradecimiento, mientras que por otro lado no existia ningún aprecio por su sacrificio cuando van en busca de la patrona. Esto nos muestra algo que el dia de hoy pasa sobre todo en las sociedad sub desarrolladas, donde empresas informales explotan a sus trabajadores para obtener una gran rentabilidad y los pobres se hacen mas pobres y los ricos más ricos.
El primer cuento no se si es de la vida real o no. Me parecio graciosa la confusion ocurrida y la forma en como se devoraron todo el banquete. Además, muestra que la patrona no da casi nada de importancia a sus trabajadires sino solamente a su riqueza. En el segundo cuento me parecio rara la forma en como «las plantas dominaban el mundo». El ultimo cuento narró los hechos de una forma tan cruda que parecia que ni el mismo autor tuviese sentimientos (asi como el limpiador). Al ultimo en como se saca el corazon fue horrible.
Inundaciones me gustó porque, de nuevo, se puede apreciar la impotencia de estos hombres que, aunque no hayan hecho nada malo, no son escuchados por nadie. Igualmente interesante es ver el dilema de si permanecer en la empresa por lealtad o «traicionarla» por una mejor.
No sabía que el profesor Güich escribiese cuentos (aunque ahora que lo pienso sí nos mencionó que iba a presentar un libro alguna vez…), bastante curioso cómo sería una sociedad en la que se vive a merced de las plantas, con una dieta a base de animales y derivados. (Aunque me pareció que se le escapó que el café es producido a partir de unas semillas, pero bueno, detalles)
El del asesinato me pareció interesante, aunque no me gustó mucho. Creo que es el primer cuento que está separado por subtítulos que leo. Sin embargo, el tema también es repetitivo, y algo anticlimático el final, hubiese esperado que el Limpiador muriese.
me gusto «INUNDACIONES», sobre todo al final, que a pesar que la mina se inundaba no perderían las esperanzas y aun así reían. También me dio como una especie de melancolía cuando menciona que los mineros eran los únicos seres vivos.
Me sorprendió mucho el final de «El limpiador», cuando se come el corazón de El Mostrenko, ya que el pensaba que si comía el corazón de un hombre volvería a sentir, porque el limpiador no sentía nada.
Me impacto mucho el espacio en el que se desarrollaba la historia era muy peligrosa y la violencia y la muerte era parte de lo normal y rutinario, así como la venganza; también hay muestras de masculinidad hegemonía y machismo, como toman a la mujer de objeto sexual.
Estos cuentos fueron fáciles de leer al igual que las lecturas de la clase pasada. El cuento que mas me gusto fue “El limpiador”, me encantó la trama espeluznante que le ponía el autor y la forma como se narraba la historia. El autor era muy minucioso con cada detalle explicaba todo a la perfección lo cual te mantiene intrigado; el cuento mezcla trama y encanto ya que apesar de lo tenebroso mezcla esto con la poesía.
Todos los cuentos me gustaron realmente. Especialmente la historia que narra Zorrilla en «El Limpiador», ya que los personajes que son muy interesantes y diferentes entre ellos. Me pareció interesante la lógica del sicario para realizar sus actos macabros. Muy buen cuento.
«Los días verdes» me pareció interesante pues es cuento de fantasía y ficción, donde tambien se puede encontrar el absurdo, una temática diferente en la cual los humanos son prácticamente oprimidos por las plantas (el reino vegetal), pero que sin embargo, no son capaces de tomar ninguna acción contra ellas, sino que por el contrario, se nuestra resignados a esa nueva vida gobernada por plantas. Con respecto al limpiador, debo decir que no me gustó mucho debido a la crudeza con la que se relatan los sucesos tan violentos y sobre todo el final que me pareció un tanto desagradable, yo también hubiese preferido que el limpiador fuese quien muriera.