Johar Arrieta

La metodología de Maastricht es distinta a la UP y es llamada Problem-Based Learning System (PBL). En este, se prima el trabajo previo, al alumno y a su participación por encima de los profesores y sus lecciones. La idea es que todas las clases son debates y uno debe ir previamente preparado para poder participar, ya que así se aprende y es calificada la participación. Es exigente, te obliga a leer previamente y una vez al ciclo te toca ser líder de discusión de toda la clase. Entre lo positivo está que terminas adentrándote más en la materia y la disfrutas más. En negativo es que te obliga a leer documentos de cierta dificultad cuando aún no te acostumbras del todo y que es algo complicado respecto a clases más matemáticas, así como que el examen final vale mucho (70% en promedio).

El alojamiento lo realicé en una residencia de estudiantes, la Guesthouse, donde convivía en un cuarto doble con un amigo francés. Era un pasillo con algo de 16 cuartos dobles, donde conocí a la mayor parte de mis amigos que eran de distintas partes del mundo: España, Turquía, Portugal, Australia, Dinamarca, Chile, Corea, Taiwán, etc. Compartíamos baño, había servicio de impresión, lavadoras, secadoras, la cocina era personal y también había estacionamiento de bicis, cancha de tenis, basket y dos supermercados a 5 minutos de distancia. La página de utilidad es www.maastrichthousing.com y ssh.com.

Respecto al Buddy Program, se realizaron varias actividades con los buddies, la mía era una chica llamada Barbara que ya estaba terminando sus estudios en Maastricht. Me ayudó en conocer a la ciudad y ciertas disposiciones como el uso de bicicleta y cierta información con los cursos.

La ciudad es pequeña, dividida en dos por el río Maas. La parte donde estaba yo era dedicada enteramente a la universidad, con mucha gente joven, pubs, bares y la universidad. Todo se mueve en bicicleta y puede parecer rutinario a menos que te vayas a ciertos parques, murallas de épocas romanas y campos de cultivos que están en las afueras de la ciudad. Los puentes son modernos y hay monumentos a los mosqueteros, ciertos santos y una plaza central donde se celebra el carnaval y diversos eventos, como el mercado semanal o conciertos de Andre Rieu. La residencia está a 5 minutos de todo en bicicleta, así que no había mayores complicaciones al moverse a menos que fuera al otro lado del río.

Respecto al tiempo libre, lo normal que hacíamos era viajar los fines de semana, porque Maastricht está en el centro de Europa Occidental y cerca de Bruselas, Eindhoven y Charleroi, centros de vuelos y trenes low cost. Si no se daba el caso podíamos salir al centro de la ciudad, por el río o simplemente con mis amigos en la Guesthouse. La vida nocturna de Maastricht es divertida y con todos los que conocías en la universidad.

No hay mayores complicaciones respecto a la matrícula, ellos te matriculan de acuerdo a los cursos que eliges. La base de datos de los cursos está en su página web con una sumilla y los días en los cuales se dicta.

Respecto a la visa, lo único que debes hacer es comunicarte con el consulado después de haber sido aceptado. De ahí, sacas una cita y en la misma llevas unas fotos pasaporte y una solicitud que llenas vía web junto a tu pasaporte para poder tramitarla. 1 semana después te entregan la visa tras registrarte.