Arantxa Romero

Las clases en Maastricht University eran muy diferentes a las de las de la Pacífico, el ciclo lo dividen en dos periodos y en cada uno se llevaba máximo dos cursos. Además, las clases son con una metodología de enseñanza diferente, la cual requería mayor participación y preparación para cada clase ya que hay un máximo de 15 personas, se debate el tema de la clase y las lecturas del día. En un principio me costó un poco adaptarme a leer 2 o 3 lecturas por clase para debatirlas ahí. Sin embargo, esta metodología me hizo aprender a ser más proactiva a la hora de estudiar, debía leer más y buscar mucha información adicional, pero principalmente, participar constantemente en las clases. Además, por cada clase, una o dos veces por periodo, en grupo de tres personas debíamos liderar la clase, no era solamente una presentación de Power Point, sino teníamos que encontrar formas creativas y dinámicas para exponer el tema preparado y hacer participar a todos de la clase.

En general, la experiencia académica que tuve fue diferente pero muy buena, aprendí muchas cosas, llevé cursos interesantes que me retaban y me hicieron ver que lo que hagas antes de cada clase, la forma de prepararte, es muy importante y necesaria.

Respecto al alojamiento me quede en el Guesthouse, el cual es una antigua clínica que ha sido adecuada solamente para alumnos de intercambio, lo que hacía que más de 200 personas vivamos juntas compartiendo por pasillos, cocina, baños y las salas comunes. El hecho que vivamos todos juntos fue algo que me gustó mucho, ya que siempre había gente buscando cosas para hacer y era muy simple juntarte con amigos.

Maastricht es una ciudad universitaria, medianamente pequeña, pero se hace aún más pequeña ya que todo está cerca del centro lo cual hace que no haya necesidad de transportarse mucho. Es una ciudad tranquila, accesible a todo lugar en bicicleta, la universidad, las tiendas y lugares para ir en las noches están a máximo 10 minutos.

Como la universidad tiene una metodología distinta, y solo se lleva dos clases a la vez, esto hace que normalmente las clases sean dos o tres veces por semana, lo que hacía que durante la semana tenga bastante tiempo libre, el cual lo utilizaba para estudiar, conocer la ciudad, ir al gimnasio o ir a ciudades cercanas.

Durante los fines de semanas (siempre incluía o un lunes o viernes completo que no tenía clases), aprovechaba para viajar. Con amigos de distintos países que conocí ahí, hicimos muchos viajes donde tuvimos la oportunidad de conocer lugares increíbles, museos y también nos divertimos.

El proceso de matrícula en Maastricht University fue muy sencillo, una vez la carta de aceptación llegó, el departamento de alumnos de intercambio de allá nos mandó las indicaciones de cómo haríamos la inscripción a los cursos y las fechas. Al tener un sistema distinto, no se sabia el horario de la clase (solo el día), ni tampoco con qué profesor, lo cual hizo que el proceso sea más sencillo.

Conjunto con la carta de aceptación, también mandaron una lista de documentos que teníamos que mandar tanto por mail como en físico. Entre ellos, estaban los requeridos para iniciar el trámite de la visa, el cual lo hicieron ellos mismos y me notificaron cuando ya estaba todo listo para presentarme, y a los 10 días tenía ya la visa temporal, la cual una vez que llegas a Holanda, se cambia por un permiso de residencia por el tiempo de permanencia. Yo recomendaría que los alumnos revisen bien todos los documentos que les dan, ya que a veces hay un simple error que después trae problemas. En mi caso, a las dos semanas de haber recibido mi carnet de residencia, abriendo una cuenta en el banco, me di cuenta que la fecha de nacimiento estaba incorrecta, pese a que en todos los documentos que mande estaba bien escrita, por este error se me complicó abrir la cuenta en el banco y tuve que realizar más trámites, que por no ser mi error no me significo un costo adicional, pero si tiempo ya que tuve que ir dos veces a la oficina de migraciones que quedaba bastante lejos, en otra ciudad.

Finalmente, en cuanto a costos de trámites, la universidad te da dos opciones a la hora de sacar la visa: o mandar estados financieros o hacer un depósito de la cantidad que ellos creen que gastaremos durante el intercambio. Yo opté por hacer la transferencia la cual fue muy sencilla sin embargo, una vez establecida en Maastricht la universidad te pide que le mandes el número de cuenta, el banco no tenía muchas citas disponibles ya que mucha gente abre la cuenta el mismo mes, por lo que tuve que esperar bastante tiempo para poder abrir mi cuenta.