Michaela Vergara Ascenzo

Hacer un intercambio es una experiencia que te ayuda a crecer en muchos sentidos y en lo personal, considero que sí logré madurar como persona y volverme mucho más independiente, solucionando sola cualquier problema que tuviese. Vivir 5 meses en un país con una cultura tan diferente a la nuestra como la alemana, y un idioma complicado, fue un reto. En Alemania todo es completamente distinto, hasta las cosas más sencillas y cotidianas como la ida al supermercado. El sistema de transporte, el orden en la ciudad, el sistema de enseñanza en la universidad, la vida nocturna, todo era muy distinto a lo que estamos acostumbrado en Lima. Afortunadamente en Düsseldorf mucha gente sabe inglés, así que si no sabes alemán era relativamente fácil comunicarte con el resto. Yo sólo tuve problemas con el idioma con las personas mayores, algunos cajeros del supermercado y con el housekeeper de la residencia, que no sabía hablar tanto inglés, pero con el resto fue bastante fácil. Además, la gente es amable y suelen estar dispuestos a ayudarte si les preguntas.

En la universidad, los encargados del departamento de relaciones internacionales fueron muy amables, en especial la coordinadora, que siempre estuvo dispuesta a ayudar con cualquier cosa que necesitáramos y a resolver cualquier duda que tuviésemos sobre como conseguir alojamiento, como manejarnos en Düsseldorf, etc. Además, se encargaron de hacer cada cierto tiempo eventos de integración con los alumnos de intercambio y alemanes. En este aspecto, creo que la HHD está muy bien, pues los encargados de los internacionales siempre están pendientes y suelen responder bastante rápido.

Las instalaciones de la HHD son bastante cómodas y es dificil perderse. Son unos 5 o 6 edificios separados y cada uno de estos pertenece a un departamento diferente, el Mensa y la biblioteca, por lo que todos los cursos que llevamos en business están en el mismo edificio. El departamento de Business está en el campus nuevo, por lo que es bastante moderna la universidad y a comparación de la UP tiene bastantes áreas verdes, en dónde la gente suele sentarse y descansar durante los huecos en verano. El Mensa estaba bastante barato pero lo malo es que cerraba bastante temprano, como a las 2.30 o 3 pm.

Respecto a lo académico, si bien la universidad no ofrece gran cantidad de cursos para los internacionales y tuve que escoger entre unos 15 cursos, al menos los que llevé me parecieron interesantes, todos dictados por profesores que sabían mucho sobre el tema y la mayoría que iban preparados a las clases. Salvo uno de mis cursos, las clases eran bastante dinámicas. En general, la metodología de enseñanza es bastante distinta a la que tenemos en la UP, en la HHD nunca te llegas a matricular propiamente, sino que solo asistes a clases (cuantas quieras) y al final del semestre te registras en los exámenes. Además, los profesores no toman asistencia, por lo que los alumnos no están obligados a ir a las clases, si no que es decisión de cada alumno atender a clases. De esta forma iban solo los alumnos que estaban motivados por aprender y no todos los que van solo por la asistencia. Tampoco dejaban trabajos semanales, parciales, ni de ningún tipo, pues en la mayoría de cursos el 100% de la nota se definía con un examen o un trabajo final. Esto puede ser bueno y malo, pues todo el peso está al final, y si uno no sabe manejar sus tiempos y lo deja todo para el final puede que llegue a jalar, ya que toda la presión del ciclo está al final y no repartida durante el semestre. De todas formas, normalmente los exámenes duran unas 3 semanas, así que hay tiempo suficiente para estudiar. Esto me pareció muy bueno porque al menos en la UP la semana de parciales y finales es matadora porque acumulan un montón de exámenes en una sola semana y es casi imposible estudiar de forma apropiada para cada uno de los exámenes. Un punto negativo de los finales en la HHD es que el rol de exámenes te lo dan durante el ciclo e incluso unas 3 semanas antes de que comiencen, por lo que uno no puede organizar sus exámenes finales como en la UP.

Respecto al hospedaje, apliqué al que te ofrece la universidad y pudo recibir uno. Normalmente le dan preferencia a los alumnos que vienen de lugares alejados de Europa según lo que tenía entendido. A pesar de que las dos residencias que ofrecen (Universitätstrasse y Bittweg) quedan lejos de la universidad y del centro, me gustó alojarme ahí, ya que es un lugar bastante tranquilo y ahí también se hospedan muchos del intercambio, por lo que nunca estas solo ni te tienes que regresar solo. A mi me tocó vivir en Universitätstrasse, que son las habitaciones privadas, en las que no tienes que compartir baño y cocina (a diferencia de las de Bittweg) y demoraba casi 40 minutos en llegar a la universidad y unos 25 para llegar al centro aproximadamente. El cuarto era bastante cómodo y a pesar de que la cocina era bastante pequeña me pareció suficiente para lo que cocinaba. El problema con las habitaciones es que te vienen vacías, por lo que tienes que comprar básicamente todo, desde sabanas, basureros hasta ollas y platos.

En la universidad teníamos aproximadamente unos 10 tutores (alumnos voluntarios que nos ayudaban con cualquier asunto que necesitáramos) para todo el grupo de intercambio que estuvieron siempre pendientes de nosotros, tratando de hacer actividades recreativas. En lo personal, yo tuve problemas con uno de mis grupos y una de las tutoras me ayudó bastante con todo el asunto. En general, los tutores me parecieron bastante amables y estaban siempre dispuestos a ayudar en lo que necesitáramos y resolver dudas por el grupo que crearon en wtp. Además, si pides con anticipación, normalmente los tutores pueden ir a recogerte al aeropuerto o a la estación central de trenes para llevarte a las residencias, siempre y cuando esté dentro de los horarios establecidos para pedir el servicio de recojo.

Düsseldorf es una ciudad bastante tranquila, ordenada y bonita. En el centro puedes ver una mezcla de edificios modernos y antiguos, incluso había una especie de “playa” a las orillas del Rin. En cuanto al transporte, era bueno, aunque pasaban cada 10-15 minutos los tram, u-bahn, etc. Lo bueno del transporte en la región es que como estudiante es “gratis”, pues tienes que pagar por el stundent ID, pero con eso puedes ir en toda clase de transporte público gratis en Düsseldorf y en toda la región (Nord Rhein Westfalia) y también incluye otros descuentos como en las cafeterías del Mensa y en la lavandería de la residencia. Esto era bastante cómodo, pues podíamos hacer day trips a cualquier ciudad cercana durante los fines con todos los del intercambio sin gastar nada. Yo pude visitar algunas ciudades como Aachen, Colonia, Bonn y Münster, que me parecieron bastante bonitas.

Como ya dije, Düsseldorf es una ciudad bastante tranquila, pero a pesar de eso en el centro siempre hay movimiento, gente tomando en los bares, en los restaurantes, tiendas o en las discotecas. Como en la mayoría de lugares de Alemania, todo cierra temprano y los domingos casi nada abre, mas que restaurantes. Además, como en gran parte de Alemania, el clima no es bonito, llueve muchísimo y puede cambiar radicalmente de una semana a otra. Literalmente puedes estar usando casaca y chalina una semana y la siguiente short y tiritas (aunque eso tampoco es tan común). Incluso en verano el clima es raro, por lo que es bueno traer siempre un paraguas, porque aunque el pronóstico del día no lo diga, puede que llueva.

Durante mi tiempo libre me dediqué básicamente a salir con mis amigos al centro o viajar. Düsseldorf tiene una ubicación bastante buena y está muy cerca de Bélgica, Holanda y el norte de Francia. Amsterdam, por ejemplo, está a solo 3 horas y media en bus y el ticket de ida y vuelta te puede costar 40 euros, que es bastante barato. Lo mismo para ciudades como Bruselas, Amberes, etc. Además, tenía el aeropuerto de Colonia bastante cerca y era gratis llegar hasta allá (ya que el aeropuerto que queda en Düsseldorf es bastante más caro para llegar a cualquier lugar en general). Este aeropuerto es low cost y puedes llegar a encontrar vuelos a 10 euros a Inglaterra y otros lugares. Si no eran estos viajes, que normalmente eran de todo el fin de semana, también nos acostumbrábamos a hacer los day trips a ciudades dentro de la región.

En el centro también hay muchos restaurantes y tiendas para pasear y pasar el tiempo. Cerca de las residencias habían, además, parques bastante grandes y bonitos como Volksgarten o Südpark. Además, en la universidad ofrecían cursos de deporte o baile gratis. Yo no me llegué a meter, pero había escuchado que eran buenos pero uno se tiene que matricular con tiempo porque se llenan los cupos.

El proceso de matricula en la HHD es bastante sencillo pero tienen que ser pacientes porque se demoran un montón en darte las opciones de cursos y los horarios. Normalmente te los dan recién durante la Orientation Week, es decir, una o dos semanas antes de que las clases comiencen. Es bastante diferente al de la UP , nunca llegas a matricularte durante el ciclo, solo te registras para los exámenes finales. En la universidad no cuentan las faltas para la gran mayoría de cursos, por lo que es posible ir a dar un examen sin haber ido a una sola clase, solo registrándote en el final. Además, en la mayoría de los cursos el 100% de la nota se definía en el examen final, por lo que es recomendable no dejarlo todo para el final e ir estudiando con tiempo para que no se acumule todo.

                                  Moneda:          Euros

N° de meses:    5 meses