Conan Doyle y el Ingenioso Sherlock Holmes, por María Victoria Valenzuela

Conan Doyle fue uno de los escritores más afamados de la literatura policiaca. Creó personajes muy importantes y queridos por el público como Sherlock Holmes y el profesor Challenger, protagonista de El Mundo Perdido.

Doyle tuvo un estilo de escritura muy amigable, el cual atrapaba a lector en el acto y hacía que el mismo simpatizara con sus protagonistas y llegara a exigir más relatos de los mismos, como sucedió con su protagonista más conocido, Sherlock Holmes, luego de que Doyle le diera muerte en «La aventura del problema final» y los lectores protestaran por el hecho, teniendo Doyle que resucitar al mismo.

En esta ocasión profundizaré un poco más sobre su personaje más conocido y el más querido por el público: Sherlock Holmes.

En todos los relatos sobre Sherlock Holmes su personaje más famoso y querido, Doyle nos muestra personajes y escenarios magistralmente trabajados (su obra describe a detalle el Londres de finales del siglo XIX además de los usos y costumbres de sus habitantes). Holmes es un personaje con una inteligencia superior al hombre común, con una capacidad analítica y deductiva muy grande y con una astucia sumamente desarrollada. Su uso de la observación y el razonamiento deductivo son las armas que le permiten resolver los casos de tal manera que primero hace pública la solución y luego va explicando poco a poco cómo llegó a la conclusión y cuáles fueron los elementos que le llevaron a esta.

Holmes es un personaje muy excéntrico el cual tiene como complemento perfecto a un coprotagonista que actúa como narrador: El doctor Watson. Él mismo es, por decirlo así, el ancla que sostiene a Holmes en la realidad, de manera que este no quede suspendido en sus elucubraciones.

Al leer las aventuras de Holmes se puede llegar a pensar ¿Qué sería de Holmes sin Watson? Él es el narrador de la historia, es aquella persona cuya admiración a la capacidad de su amigo para desenredar problemas que parecían no tener solución e insaciable curiosidad de vivir experiencias a través de los casos que se plantea; hace que sea el nexo entre el excéntrico Holmes y el público. Al servir Watson como nexo, Doyle logra que la capacidad de raciocinio de Holmes no se vea cortada por su habilidad de sociabilización; lo cual hace que este sea mucho más atrayente al público en general que el personaje August Dupin de Edgar Allan Poe, que si bien es un genial investigador no tiene la llegada con el público al ser tan introvertido y calculador al esperar tomar acción.

Holmes siempre persigue un objetivo y sus motivaciones van siempre en el mismo camino, conocer la verdad cueste lo que cueste, a diferencia de Auguste Dupin, personaje creado por Edgar Allan Poe, conocido como un predecesor muy similar a Holmes que cambiaba de motivaciones

–curiosidad, dinero– para resolver misterios. Holmes es siempre fiel a su estilo y a lo largo de sus aventuras combina sus habilidades para llegar a una solución y a su vez compartir la misma con Watson, su acompañante, narrador y coparticipante de sus aventuras.

El personaje de Doyle a su vez fue predecesor de otros grandes personajes como el detective belga Hércules Poirot de Agatha Christie, el cual hace uso de métodos muy similares a los de Holmes (aplicación del método científico y deducción) para solucionar sus casos y encontrar la verdad. Conan Doyle con Holmes, creo un precedente para la literatura policiaca. Tal vez no fue el primer autor en tratar este tema, pero su personaje quedo impregnado con sus hazañas y grandiosas habilidades, en el modelo de investigador que autores posteriores a Doyle usaron para sus obras.

La relevancia que tuvieron las aventuras de Holmes en los lectores, hizo que se crearan a partir de sus aventuras obras apócrifas las cuales enumeraban muchos episodios acerca de casos no descritos por Doyle. Incluso Holmes es en la actualidad una de las figuras más representadas de la historia del cine, Doyle ha sido una grandiosa fuente de inspiración para efectuar una gran cantidad de adaptaciones para su personaje siendo así transmitido a nuevas generaciones, sin dejar de tener el mismo efecto sorprendente que tuvo la primera publicación en el diario de sus aventuras. Doyle no creyó el éxito de su obra, sin embargo al analizar a su personaje, el empeño para caracterizarlo de tal manera que nos resulte real y el mismo nivel de análisis del propio Doyle, hacen que Holmes y sus aventuras sean inmortales, prueba de ello es que actualmente se emite una serie británica bajo el nombre de Sherlock, 125 años después de la aparición del detective.