“La autopista del sur” de Julio Cortázar, por Lia Alexandra Adrianzén

Este cuento narra acerca de un grupo de automovilistas que viajan hacia París un día muy soleado y quedan atorados en un gran embotellamiento. Ante el desconcierto y la falta de información de alguna autoridad, se empiezan a formar pequeñas sociedades entre las personas. El personaje principal de la historia es un ingeniero que manejaba un Peugeot 404, quien empieza a organizarse junto a los autos más cercanos al suyo. Cabe resaltar que se trata de una narración en tercera persona donde el narrador es omnisciente y no hay muchos diálogos; y que las personas son llamadas por los autos que poseen.

Podemos encontrar un grupo muy diverso, con personas de diferentes personalidades y edades, hay familias con niños, parejas, ancianos, jóvenes, monjas etc. Los miembros de esta pequeña comunidad logran juntar sus alimentos y agua y ayudarse entre ellos. Sin embargo, conforme van pasando los días, en los cuales sus carros avanzan unos cuantos metros, y van escaseando sus víveres, se ven en la necesidad de interactuar con otras pequeñas sociedades también formadas por el atasco. Así vemos originado el comercio, que más adelante da cabida a un mercado negro ya que los campesinos y gente que vivía al borde de la carretera no les querían vender nada pensando que eran del gobierno.

Se originan también lazos entre los personajes, como la relación entre la muchacha del Dauphine y el ingeniero del Peugeot, el cual llega al punto de hacer planes con ella para cuando salgan de ahí. Al interactuar por ese tiempo hay un cierto aprecio entre todos los “vecinos” y ya tienen hasta una rutina diaria. Suceden también hechos lamentables, como la muerte de la anciana del Citroen violeta y el suicidio del hombre del Caravelle.

Finalmente la historia acaba cuando una mañana y sin previo aviso, los autos empiezan a avanzar más que solo unos metros. Al parecer se acabo el embotellamiento y por fin podrán irse a casa. El ingeniero maneja con todos sus “vecinos” alrededor y en especial con la muchacha del Dauphine al lado pero conforme van avanzando pierde a todos de vista. Maneja solo negándose a aceptar que todo acabo y cada uno se dedica a ver de frente a su camino.

Elegí este relato porque me agradó mucho, la historia es algo larga y uno puede llegar a enredarse con tantos personajes y sus autos, pero la lectura es ligera y con un lenguaje simple. Muestra una metáfora de la sociedad actual increíble, con situaciones y problemas que vemos y vivimos día a día, como la interacción con gente distinta a nosotros, la organización de nuestra sociedad, problemas de corrupción o violencia, etc. Y con personajes muy humanos con los que nos podemos identificar.